COLABORADOR:
DIEGO MAYOR --- COE 42
Boinas Verdes (1968)
Título original: The Green Berets
Duración: 136 min.
País: Estados Unidos
Guión: James Lee Barrett & Col. Kenneth B. Facey
(Basado en la novela de Robin Moore del mismo título)
Música: Miklós Rózsa
Fotografía: Winton C. Hoch
Reparto: John Wayne, David Janssen,
Jim Hutton,
Aldo Ray,
Raymond St.
Jacques, Bruce Cabot,
Jack Soo,
George Takei,
Patrick Wayne,
Luke Askew,
Irene Tsu,
Edward
Faulkner, Jason Evers,
Mike Henry,
Craig Jue
Productora Warner Bros. Pictures
Sinopsis:
Durante
la guerra de Vietnam, un coronel estadounidense del cuerpo especial conocido
como 'Boinas verdes', invita a un escéptico reportero a que los acompañe en una
ofensiva en la que tratarán de capturar a un oficial vietnamita.
(FILMAFFINITY).
TRAILER ORIGINAL DE LA PELICULA
En plena
guerra de Vietnam cuando las tropas americanas empezaban a pasarlo mal, la
opinión pública estadounidense comenzó a criticar la presencia de tropas yankis
en ese remoto país asiático. Para contrarrestar dicha opinión Hollywood y John
Wayne con la colaboración del ejército, produjeron esta película
propagandística que no llegó a funcionar. Ver a todo un John Wayne en plan
patriota vestido de militar, M-16 en mano, meterse de lleno en una guerra en la
que no pega ni con cola no tiene precio. Más de dos horas de duración en la
que, de una forma maniquea y parcial,
trata de justificar la intervención armada de los americanos en Vietnam.
“Boinas Verdes” puede tener un pase si ponemos el nivel de
exigencia bajo mínimos. Nada más empezar con los títulos de crédito, la
patriótica “Balada de los Boinas Verdes” pone en
situación al espectador y nos indica por dónde irán los tiros (nunca mejor
dicho). En otra escena del film un grupo de militares se dirije a un grupo de
periodistas y les afirme que Vietnam les necesita y que “¡Lo que está en juego aquí es la dominación comunista del mundo!”. El Vietnam que
se muestra es bien distinto de las posteriores incursiones de otros cineastas más
realistas con el conflicto bélico. Evidentemente hemos de tener en cuenta el
contexto de la época en que se rodó: la propia Guerra de Vietnam, la Guerra
Fría, la dicotomía EE.UU.-URSS.
John
Wayne co-dirigió y produjo esta película rellena de los topicazos del género
del oeste de los años 50. En lugar de sanguinarios comanches tenemos a
sanguinarios guerrilleros del Viet-Cong. Para rematar la faena, no se cortan a
la hora de exagerar el tono propagandístico por lo que la película parece un
larguísimo (y aburrido) anuncio de reclutamiento para el ejército
norteamericano.
El
Pentágono apoyó la obra desde el principio. El material y los uniformes que
aparecen en la película son totalmente auténticos, incluidos los uniformes del
ejército de Vietnam del Sur. No se puede decir lo mismo de la representación de
los combatientes del Viet-Cong interpretados por japoneses–americanos. En
cuanto al aspecto histórico, la escena del ataque del Viet-Cong sobre la
posición fortificada parece que está basada en el asalto a Nam Dong. Como era de esperar en una producción de Hollywood, la
película no fue filmada en Vietnam sino en Fort Benning, Georgia. El lugar
donde se entrenaban los auténticos Boinas
Verdes.
Resumiendo, a pesar de
ser la película que presentó en “sociedad” a los boinas verdes
(cinematográficamente hablando), el film no puede considerarse ni siquiera una
obra menor. En la carrera de John Wayne este trabajo y el de El conquistador de Mongolia
están considerados como los peores de su filmografía. Sin rigor y seriedad la
película es una pantomima aburrida y tediosa, aunque no dudo en que pueda
tener, a pesar de sus años, algún que otro seguidor.